Pastel Vegano de Calabaza y Lentejas – La Receta Saludable y Reconfortante que Querrás Repetir

Un pastel vegano fácil y nutritivo con calabaza asada y lentejas. Ideal para el otoño, lleno de sabor, sin carne ni lácteos. ¡Te sorprenderá!

Cuando llega el otoño y las hojas empiezan a caer, el cuerpo nos pide platos cálidos, nutritivos y llenos de sabor. Es en esos días frescos cuando más valoramos una buena receta casera que nos abrace desde dentro. Y este pastel vegano de calabaza y lentejas es justo eso: una fusión perfecta entre tradición y cocina vegetal moderna, ideal para compartir en familia o disfrutar en soledad con una manta y una taza caliente.

Este plato se inspira en el clásico pastel de carne, pero lo reinventa por completo. En lugar de carne, utilizamos lentejas guisadas con verduras, hierbas y especias que aportan un sabor profundo y aromático. La capa superior, suave y ligeramente dulce, se elabora con calabaza asada y patatas, creando una combinación cremosa que se gratina al horno hasta formar una costra dorada irresistible.

Además de ser una opción sabrosa y reconfortante, este pastel es 100% vegano, sin productos de origen animal, lo que lo convierte en una alternativa perfecta para quienes siguen una alimentación basada en plantas o simplemente quieren reducir su consumo de carne. Es un plato lleno de nutrientes, rico en fibra, proteínas vegetales y con un perfil de sabor que encantará incluso a los más escépticos.

En este artículo te mostraremos cómo preparar este pastel paso a paso, con ingredientes sencillos, consejos para adaptarlo a tu gusto, trucos de conservación y propuestas de acompañamiento. Prepárate para descubrir una receta que no solo alimenta el cuerpo, sino también el alma.

Ingredientes y preparación detallada de este pastel vegano de calabaza y lentejas 🥘

La magia de esta receta está en su sencillez. No necesitas técnicas sofisticadas ni ingredientes exóticos. Solo productos naturales, fáciles de encontrar, y un poco de cariño. Lo mejor de todo es que, aunque parezca un plato elaborado, es muy accesible y perfecto incluso para quienes están empezando en la cocina vegana.

🌱 Ingredientes para la base de lentejas:

  • 200 g de lentejas verdes
  • 1 cebolla mediana
  • 2 zanahorias
  • 1 rama de apio (opcional, pero aporta mucho sabor)
  • 2 dientes de ajo
  • 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
  • 1 cucharada de concentrado de tomate
  • 1 cucharadita de tomillo seco
  • 1 cucharadita de pimentón dulce o ahumado
  • 500 ml de caldo de verduras
  • Sal y pimienta al gusto

🎃 Ingredientes para el puré de calabaza:

  • 1 calabaza pequeña (aprox. 800 g, tipo potimarrón o butternut)
  • 2 papas medianas harinosas
  • 2 cucharadas de aceite de oliva o margarina vegetal
  • Sal, pimienta y una pizca de nuez moscada

👩‍🍳 Preparación paso a paso:

Comienza cocinando la base de lentejas. Lava las lentejas bajo el grifo y resérvalas. En una olla grande, sofríe la cebolla picada con el aceite de oliva hasta que esté transparente. Añade el ajo picado, la zanahoria en cubitos y el apio. Cocina durante unos minutos removiendo constantemente.

Incorpora las lentejas, el concentrado de tomate, el tomillo, el pimentón y el caldo vegetal. Mezcla bien, baja el fuego y deja que todo se cocine durante 25 a 30 minutos, o hasta que las lentejas estén tiernas y la mayor parte del líquido se haya absorbido. Ajusta la sal y la pimienta según tu gusto. Esta mezcla será el corazón sabroso de tu pastel.

Mientras tanto, prepara el puré de calabaza. Pela las papas y córtalas en trozos medianos. Corta la calabaza por la mitad, quita las semillas y trocéala (puedes dejar la piel si es fina). Cocina ambos ingredientes al vapor o en agua con sal hasta que estén blandos. Luego escúrrelos y tritúralos con un tenedor o batidora hasta obtener un puré suave. Añade el aceite de oliva, sal, pimienta y una pizca de nuez moscada. Si quieres, puedes agregar un chorrito de leche vegetal para una textura más cremosa.

Precalienta el horno a 180 °C. En una fuente para hornear, coloca la mezcla de lentejas en la base, distribuyéndola de forma uniforme. Luego extiende cuidadosamente el puré de calabaza por encima, alisando la superficie con una espátula o tenedor. Puedes decorar la parte superior haciendo líneas con el tenedor para que se dore de forma más rústica. Rocía con un poco de aceite de oliva y, si deseas, espolvorea pan rallado o levadura nutricional para un toque crujiente y dorado.

Hornea durante 25 minutos, hasta que la superficie esté ligeramente dorada. Sirve caliente, acompañado de una ensalada fresca o verduras al horno. El aroma que saldrá del horno te hará agua la boca, ¡y cada bocado será puro placer!

Beneficios nutricionales del pastel vegano de calabaza y lentejas 🧡

Este pastel no solo es un placer para el paladar, sino también un regalo para el cuerpo. Su combinación de ingredientes naturales y vegetales lo convierte en una comida completa, rica en nutrientes esenciales, ideal para quienes buscan una alimentación más consciente, equilibrada y saludable.

Las lentejas, protagonistas de la base del pastel, son una fuente excelente de proteínas vegetales. A diferencia de las proteínas animales, las vegetales no contienen colesterol y vienen acompañadas de fibra, lo que ayuda a mejorar la digestión y mantener estables los niveles de azúcar en sangre. Además, aportan hierro, zinc, fósforo y vitaminas del grupo B, fundamentales para la energía y el sistema nervioso.

El alto contenido de fibra en las lentejas también favorece la saciedad, lo que significa que este pastel te mantendrá lleno durante más tiempo, ayudando a evitar picoteos innecesarios entre comidas. Esto lo convierte en un aliado para quienes buscan mantener o reducir peso sin renunciar al sabor ni a la satisfacción.

La calabaza, por su parte, es baja en calorías pero rica en antioxidantes. Su color naranja intenso revela una gran cantidad de betacarotenos, precursores de la vitamina A, que fortalecen la visión, la piel y el sistema inmunológico. También contiene vitamina C, que ayuda a combatir resfriados, y potasio, un mineral clave para mantener la presión arterial equilibrada.

Otro punto a favor de este plato es que no contiene lácteos ni grasas animales. Al usar aceite de oliva o margarina vegetal, se favorece el consumo de grasas saludables, especialmente ácidos grasos monoinsaturados, que ayudan a reducir el colesterol malo (LDL) y proteger el corazón. También es apto para personas intolerantes a la lactosa o alérgicas a los productos animales.

Y si hablamos del índice glucémico, este pastel tiene una carga moderada, sobre todo si se usan patatas de tipo harinoso o se sustituye una parte por boniato (batata). Esto significa que proporciona energía de liberación lenta, ideal para quienes buscan mantener estables sus niveles de energía durante el día.

En resumen, este plato es una combinación ganadora: proteínas, fibra, antioxidantes, vitaminas y minerales, todo en una sola preparación, sin ingredientes procesados ni aditivos. Es una forma deliciosa de cuidar tu salud mientras disfrutas de una comida reconfortante y casera. Además, al ser tan completo, no necesitas añadir mucho más: un poco de ensalada fresca o una sopa ligera como entrada, ¡y tendrás un menú perfecto!

Variaciones, conservación y acompañamientos para disfrutar este pastel al máximo 🌿

Una de las grandes virtudes de este pastel vegano es su versatilidad. No es solo una receta, sino una base que puedes transformar según la temporada, los ingredientes que tengas a mano o incluso tu estado de ánimo. Y lo mejor: siempre queda delicioso.

✨ Variaciones sabrosas que puedes probar:

Si no tienes calabaza, puedes sustituirla por boniato (batata), que le aportará un sabor dulce y cremoso similar. También puedes mezclarla con zanahoria o usar puré de coliflor para una versión más ligera. ¿Te gusta el toque cremoso? Añade una cucharada de leche vegetal o incluso levadura nutricional al puré para obtener una textura sedosa y un sabor ligeramente a queso.

¿No te agradan las lentejas verdes? Prueba con lentejas rojas (reducen el tiempo de cocción), garbanzos triturados o una mezcla de setas salteadas con nueces picadas. Incluso puedes añadir espinacas cocidas o brócoli troceado a la base para incorporar más vegetales y colores.

🧊 ¿Cómo conservarlo correctamente?

Este pastel es perfecto para preparar con antelación. Se conserva muy bien en la nevera durante 3 a 4 días, guardado en un recipiente hermético. Puedes recalentar porciones individuales en el horno o incluso en el microondas. De hecho, algunos dicen que al día siguiente está aún más sabroso, ya que los sabores se intensifican.

Si preparas una gran cantidad, puedes congelarlo sin problema. Para ello, deja que se enfríe completamente, divídelo en porciones y congélalas por separado. Cuando quieras disfrutarlo, solo tendrás que descongelar durante la noche en la nevera y calentar en el horno. Es ideal para esos días en los que no tienes tiempo ni energía para cocinar.

🥗 Ideas para acompañarlo con equilibrio:

Aunque este pastel ya es un plato completo por sí solo, puedes acompañarlo con una ensalada fresca para aportar contraste y ligereza. Una ensalada de rúcula con vinagreta de mostaza, una ensalada de remolacha y manzana, o incluso unos tomates cherry con albahaca funcionan de maravilla.

Otra opción es servirlo junto a una crema ligera de verduras como entrada: una sopa de puerros, de zanahoria y jengibre, o una crema de calabacín harán que el menú sea aún más reconfortante. Y si buscas un toque especial, espolvorea por encima del pastel un poco de pan rallado, semillas de girasol o levadura nutricional antes de hornear para una capa superior crujiente y sabrosa.

En definitiva, este pastel vegano no solo es nutritivo y sabroso, sino también práctico y adaptable. Puedes hacerlo más simple o más sofisticado según el momento, guardarlo para después o compartirlo con quienes más quieres. ¡Una receta que sin duda se convertirá en un clásico en tu cocina!